LA BATALLA DE SAN MARCIAL DE 1522

 

 

EPISODIO 8

 

 

A finales de mayo de 1522, Beltrán de la Cueva recibe una Real Instrucción en la que se especifica cómo debe preparar, organizar y abastecer las tropas con miras a las próximas operaciones contra los invasores.

Cuenta con un ejército de unos mil quinientos hombres de infantería concentrados en San Sebastián, a los lo que hay que añadir los locales de Juan Pérez de Azcue y Miguel de Ambulodi, destinados a actuar en el Bajo Bidasoa.

Al mismo tiempo se organiza en San Sebastián un cuerpo de marina con cuatro embarcaciones para guarda de la costa en la desembocadura del Bidasoa, para evitar los abastecimientos que el enemigo pudiera recibir, casi en exclusiva, desde el mar.

El 26 de junio ya está arreglado y fortificado el castillo de Behobia donde hay una guarnición de cien soldados.

¡Mon Dieu! Los franceses no tardan en darse cuenta del enorme error que supuso abandonar el castillo sin arrasarlo. Sienten como oprobio que, siendo dueños de Hondarribia, a unos pocos kilómetros, la fortaleza esté en manos imperiales, guardada su espalda por los naturales de Irun.

Así pues, de inmediato comienzan a preparar la reconquista de la posición perdida, concentrando en la frontera unos mil hombres de la tierra de Lapurdi, tres mil quinientos lansquenetes (soldados alemanes a sueldo del rey de Francia). Cuentan además con la ayuda de los señores de Alzate, Sumbilla, Bértiz y otros baztaneses.

La batalla es inminente.

 

 

 

Lansquenetes. Xilografía de Erhard Schon, 1532.

 

(Continuará…)