PRIMERA GUERRA CARLISTA EN

IRUN Y HONDARRIBIA (1833-1840) 


 

 

CAPÍTULO 4

 

 

A primeros de 1836 se designan en Irun las personas adictas a don Carlos que deben ocupar cargos municipales, siendo nombrado alcalde Juan Antonio Otamendi, quien colabora con las fuerzas carlistas para poner Irun en buen estado de defensa, considerando fundamental la toma del fuerte de Behobia, en poder de los liberales.

Para ello construyen en el conocido como vado de las Nasas en el Bidasoa, sobre dos grandes gabarras, una especio de torre flotante tapizada con sacos de lana, con tres troneras para cañón y desde allí disparar contra la fortificación de los liberales.

Antes de comenzar el ataque, el comandante carlista Soroa envía una misiva al comandante francés acantonado en Behobie, indicando que su intención es únicamente demoler el fuerte.

Los franceses al mando del general Harispe consideran que la torre artillada carlista es una manifestación demasiado hostil,  y ordena destruirla a cañonazos y apoderarse de sus restos cuando baja la marea, llevándose a Hendaya también una embarcación cargada de doscientos proyectiles y pólvora que los carlistas tenían prevista para el ataque, en tanto que el cañón incautado es entregado por los franceses a Iturriza,  comandante del fuerte de Behobia.

Soroa y el Ayuntamiento, indignado por la actitud francesa, amenazan con quemar las casas de algunos liberales iruneses, a lo que responde Nogués, uno de los representantes del bando liberal,: “Decid al Ayuntamiento que si quema una sola casa, pediré la autorización correspondiente al general francés Harispe, tomaré fuerza y pasaré a Irún a castigar su atrevimiento”.

 

 

Boceto de la batalla de Behobia.

(Colección de R. Guirao).

 

 


 

 

(Continuará…)