ARISTI

 

A Juancho, Señor de Aristi ya se le cita en 1481.

 

Otro de los datos más antiguos referente a este caserío se encuentra en el archivo de Hondarribia.

 

En 1585 María de Urdanibia, esposa de Joanes  de Ibaeta, vendía pan y vino en el citado caserío.

 

Curiosamente, terminada la invasión napoleónica, vuelve a aparecer el mismo caserío, en el que habitaban entonces Juan Ignacio Urbieta y su esposa Josefa Antonio de Echenagusía, a los que la Diputación llama al orden -utilizando unos términos que no transcribimos por su excesiva dureza-  precisamente por la venta de "comestibles y potables".

 

En 1869 sufrió un importante incendio.

 

En el libro de actas del Ayuntamiento de Irun consta la petición de maderamen para su reconstrucción por el que fuera propietario en aquella fecha, Martín Masmela.

 

El nombre de Aristi indica que en aquella zona abundaba el roble.