Durante los días 2 y 3 de julio del pasado 2023, Irun fue una de las pocas localidades por las que el Tour de Francia pasó en dos ocasiones.

La primera, que había partido desde Donostia, con subida a Jaizkibel por Hondarribia, y la segunda por el centro de la ciudad camino de Iparralde, hasta Bayona.

José Mari Errandonea, en el podio del Tour de France, entre dos grandes figuras del ciclismo mundial, Felice Gimondi y Raimond Poulidor.

(Foto: El Correo Español).

No había pasado mucho tiempo desde que los aficionados al ciclismo disfrutaran con el paso de las grandes figuras de este deporte.

La más destacada había sido la del 24 de agosto de 2022, cuando la quinta etapa de “La Vuelta” partió de la plaza del Ensanche.

Antes, en octubre de 2020, Irun fue el punto de partida de la ronda española, aunque en aquella ocasión la pandemia no permitió disfrutar como se debería del gran acontecimiento.

Pero hay que remontarse varios años atrás, cuando todo Irun vibró con una de las gestas ciclistas más impactantes que tuvo como protagonista a uno de sus vecinos: José Mari Errandonea Urtizberea,

El 29 de junio de 1967, José Mari obtuvo el triunfo más importante de su carrera deportiva: la victoria conseguida en la etapa prólogo contra reloj del Tour de Francia, venciendo contra todo pronóstico al favorito, el francés Raimond Poulidor, al que sacó seis segundos, y enfundándose aquel día el maillot amarillo, que lució durante dos jornadas.

Era el primer prólogo de la historia del Tour. Una crono de apenas seis kilómetros por las sinuosas y adoquinadas calles de Angers, en la región del Loira, programada a una hora muy tardía, iluminada con lámparas de gas.

En aquel entonces el Tour se disputaba por selecciones nacionales.

Errandonea recibiendo felicitaciones en el podio del Tour.