VIRGEN DEL JUNCAL.RESTAURACIONES


A lo largo de los siglos la imagen de la Vírgen de Nuestra Señora del Juncal ha sufrido varias modificaciones y restauraciones.

 

 

Año 1953. La imagen de la Virgen del Juncal, en Madrid, para ser restaurada.

Obsérvese que aparece sin el Niño en su regazo.

Sentado a la izquierda el párroco D. David Esnal.

(Foto: Cortesía de Alberto Merino Navarrete).

 

El niño Jesús situado en su regazo y la parte inferior de la talla son añadidos posteriores a la aparición de la imagen.

 

También su corona y sus manos han sido modificadas en distintos momentos de su historia, de acuerdo con las necesidades y costumbres de cada momento histórico, o por deterioro de las mismas.

 

Durante años hemos conocido la imagen con un tono más oscuro.

Probablemente, la tez de la Vírgen del Juncal se encontraba algo sucia tras haber pasado siglos rodeada de velas y lámparas de aceite.

Es posible también que, en alguna restauración anterior, se le hubiera aplicado betún para unificar su aspecto.

 

Durante largos períodos la imagen de la Vírgen no portaba ningún manto.

 

En 1928 el Sr. Cura Párroco envió un escrito al Ayuntamiento  interesando se nombrase un representante que formara parte de la Comisión que había de dictaminar si la imagen de la Virgen del Juncal, Patrona de la Ciudad, había de continuar revestida con manto o no.

 

Unos años antes de la coronación de la Virgen, que tuvo lugar en 1954, se proyectó una restauración de la imagen para prepararla para tan magno acontecimiento.

 

La figura se envió a Madrid y volvió reforzada porque iba a tener que sujetar un peso sobre su cabeza.

 

La última restauración de la imagen tuvo lugar en 2007 a cargo de la empresa Arietta S.L.

Desde entonces la virgen muestra una tez blanca y mejillas sonrosadas

 

 

 

La imagen de la Virgen del Juncal antes y después de la última restauración.